El Comité Intergremial del Magdalena -CIMAG- como vocero del sector productivo y empresarial del Departamento, expresa su preocupación ante los reiterados bloqueos y obstrucciones viales por parte de las comunidades en diferentes zonas del Magdalena como forma de expresar sus inconformidades y elevar sus peticiones a las diferentes autoridades.
Una de las zonas de mayor concentración de protestas son los barrios aledaños a la vía alterna al Puerto de Santa Marta, donde se han presentado quemas de llantas en las vías públicas, interrumpiendo así, el paso en esta arteria fundamental para el correcto funcionamiento del sistema logístico.
Lo anterior, sumado a los bloqueos en la vía Río Ariguaní – Ye de Ciénaga a la altura del corregimiento de Santa Rosa de Lima en el Km 21, donde se han reportado cierres en la carretera Troncal de Oriente por parte de los habitantes del sector, ocasionando parálisis y retrasos en el transporte de mercancías provenientes desde el centro del país y de gran parte de la producción agroindustrial del Departamento.
De la misma manera, los mototaxistas del Distrito también han generado bloqueos afectando la movilidad en la ciudad, el orden público y seguridad del territorio.
Todas estas manifestaciones que obstruyen la vía pública están repercutiendo negativamente desde diferentes perspectivas. La imposibilidad de transportar mercancías de manera fluida y eficiente afecta directamente a las empresas y negocios locales, la interrupción en la cadena de suministro puede ocasionar retrasos en las entregas, escasez de productos, pérdidas económicas significativas y pone en riesgo el traslado de pacientes a centros de salud. Además, los sectores que dependen de una movilidad adecuada, como el turismo, se ven gravemente afectados por la falta de acceso y disminución de visitantes.
De este modo, desde el CIMAG instamos a todas las partes, ciudadanos, líderes, autoridades, administración distrital y departamental para buscar soluciones pacíficas y constructivas que permitan garantizar el interés colectivo, así como el normal funcionamiento de las actividades comerciales, turísticas, agroindustriales y toda la cadena logística de la que dependen miles de familias para su sustento económico en la región