¿Quién no queda encantado con los mágicos atardeceres en la «Bahía más linda de América»? Desde ahora, samarios y visitantes nacionales y extranjeros tendrán un nuevo punto desde el cual apreciar y conocer por qué Santa Marta es conocida como la ciudad #NaturalmenteMágica, esto gracias a la apertura al público del remodelado Camellón de la Bahía.
De esta forma, disfrutar de una mágica vista frente a El Morro, el eterno guardián de la ciudad; o deleitarse con los populares jugos naturales, gastronomía ancestral propia de la Costa y cocina internacional frente a un atardecer, o recorrer en familia este nuevo punto de atracción turística son los nuevos planes a los que se le apuntan para diversificar la ruta de sitios turísticos que se pueden aprovechar en el Centro Histórico.
Desde ahora los visitantes podrán realizar un circuito único recorriendo la Catedral de Santa Marta, el Museo del Oro Tairona, quedar encantados con el renovado Teatro Santa Marta; caminar por el Parque de los Novios y disfrutar de la oferta gastronómica en los restaurantes al aire libre; además de enamorarse de las fachadas históricas de decenas de edificaciones que guardan celosamente la historia de la ciudad, o de los murales coloridos que decoran otras, y culminar en este nuevo malecón con cicloruta, amplias zonas verdes, zona de mascotas y puntos de atención a turistas.
El Camellón de la Bahía se convierte ahora en un punto de convergencia de todas las familias sin distingo alguno. Es, más allá del encuentro con el mar, el orgullo de los samarios y de la pujanza de esta ciudad llena de cultura, colores y alegría que se proyecta al mundo. Además, de ser punto de referencia para quien llegue a la ciudad y encuentro en este lugar el mejor escenario para retratar cómo se vive la Experiencia Santa Marta.
Es preciso indicar que, con este remodelado Camellón, Santa Marta avanza en su consolidación como un destino turístico más competitivo, atractivo, inclusivo, innovador y ambientalmente sostenible; y al que se espera pronto sumar el Camellón de El Rodadero.
Con la habilitación de esta importante obra, Santa Marta se engalana y presenta su mejor cara a los turistas que arriban por las decenas de cruceros que recalan. Una apuesta importante para seguir fortaleciendo la oferta turística de la capital del Magdalena, que se suma así al turismo de sol y playa, cultural e histórico, de aventura y naturaleza.