Representantes de la Iglesia Católica y las demás iglesias cristianas de Santa Marta, se unieron a estudiantes, jóvenes, padres de familia y comunidad en general, en una marcha pacífica, que salió del Polideportivo y durante dos horas, recorrió las calles hasta llegar a la plaza de Bolívar, en donde con voces y pancartas, defendieron el derecho de los padres a educar a sus hijos, de acuerdo a sus creencias y principios y rechazaban la ideología de género, como supuestamente, lo pretende implantar la Ministra de Educación Gina Parody, a través de unas cartillas de convivencia escolar, que circularon por las redes sociales.
POR QUÉ MARCHARON EN SANTA MARTA?
Monseñor Luis Adriano Piedrahita, señaló que valora el hecho que muchas personas de diferente condición, raza, política, religión, se reuniesen con el único propósito de defender la conservación del núcleo familiar compuesto por un hombre y una mujer , como factor de crecimiento y progreso de una humanidad basada en el amor conyugal y familiar.
“Marcho para que la opción de unos, no se convierta en norma para todos” respondió Marcela Arango
Marlene Velásquez, madre de 2 niños varones y una hija, manifestó que en el colegio deben formarlos académicamente, pero los principios morales, se los inculca ella y su esposo.
Víctor Castaño, joven universitario de 19 años, aseguró que marcha, para defender los valores que le enseñaron sus padre y su madre y son los que él, le enseñará a sus hijos cuando los tenga.
Rosana Torres, docente pensionada del Departamento señaló “Por Dios, a mí, me hubieran votado del magisterio, porque jamás, hubiese aceptado que me impusieran semejantes directrices. Y marcho, por el futuro de mis nietos y de todos los niños de Colombia”.
EL CAUSANTE DE LA POLÉMICA:
La polémica, se inicia, por las redes sociales, cuando algunos padres de familia, aducen de unas capacitaciones dirigidas a docentes de colegios públicos, las cuales estarían acompañadas por cartillas que con las que ellos debía orientar sexualmente a los escolares, pero con ciertas costumbres, contrarias a la identidad tradicional de las familias colombianas, como por ejemplo, de que nadie nace siendo hombre o mujer, sino que el niño o la niña, deben escoger su sexo, de acuerdo a sus gustos y que nadie debe discriminar al niño que quiera usar faldas o a la niña que quiera vestir como niño y por lo tanto los baños de los colegios, tendrían que ser mixtos.
Las cartillas, formarían parte de un documento, elaborado por el Fondo para la Infancia de las Naciones Unidas (Unicef), el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud) y el Ministerio de Educación Nacional.
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