La emblemática hacienda de San Pedro Alejandrino se viste de gala este viernes 17 para recordar el momento histórico que la convirtió hace 191 años como el sitio donde exhaló su último suspiro El Libertador Simón Bolívar.
Se ha dispuesto una programación cultural donde se harán honores al gran héroe nacional y además se dará apertura e inauguración a la exposición ‘Del otro lado del mar’ retrospectiva del artista santandereano Álvaro Valbuena.
Desde las 6 de la tarde se inician estos actos conmemorativos que tendrán lugar en el Altar de la Patria del Monumento, con la conmemoración del aniversario de la muerte de El Libertador Simón Bolívar, se cierra la agenda de actividades que fortalecieron la Misión, destacando el compromiso que tiene el Museo con el arte, la educación, la historia, el ambiente y la cultura en nuestra ciudad y región Caribe.
Las alianzas consolidan la labor por la cultura, en un proceso de permanente retroalimentación con la comunidad y trabajo conjunto desarrollado con entes gubernamentales, fundaciones sin ánimo de lucro y empresas del sector privado; de esta manera fue el trasegar de la Fundación Museo Bolivariano de Arte Contemporáneo durante este 2021.
Así lo comentó la Directora, Licenciada Zarita Abelló de Bonilla, quien dijo que gracias al empuje de su equipo de trabajo estos dos últimos años ha permitido mantener el Monumento, con la firme proyección de un año 2022 de alianzas, integración y novedades alrededor de cada una de las colecciones del Museo.
Para conmemorar esta fecha de los 191 años de la muerte de El Libertador se cuenta con la inauguración en la sala Hernando Del Villar de la exposición ‘Del otro lado del mar’ retrospectiva del artista bumangués Álvaro Valbuena pintor y fresquista colombiano, quien durante su residencia en España y Francia, vivió y laboró construyendo su vida desde las artes plásticas.
Las obras del Maestro Valbuena expresan el triunfo del realismo. Esos personajes y otros que salen de las sombras son como un sueño con una fuerza casi emblemática. Vive y trabaja entre Colombia y Paris, en la capital francesa pudo afinar su escritura, desprenderse de los gestos aprendidos confortando la maestría de su trazo y la sobriedad de su compaginación.
Durante su residencia en España y Francia, vivió y laboró construyendo su vida desde las artes plásticas. Las obras del Maestro Valbuena expresan el triunfo del realismo. Esos personajes y otros que salen de las sombras son como un sueño con una fuerza casi emblemática.
Las pinturas figurativas de este gran artista son trabajadas con meticulosidad eliminando detalles que atenten con la intensidad predominante, los colores abarcan una amplia gama y la luz es tratada con rigurosa suficiencia, sus obras de visiones, sentimientos, algo de sutilezas poéticas que recrea personajes en busca de sentido que lo integre todo, en un proceso que se reviste conceptual y emocional de ideas, imágenes, sensaciones… pero sobre todo es el destino del soñador, cuya imaginación trasciende el universo.
El experto Pierre Brisset expresa que con sus carbones el maestro Valbuena sumerge al espacio de la corporealidad del ser humano para contemplar sus movimientos más íntimos e identidades esencialistas y apelamos a un origen común. ¡Si todo el talento de Álvaro Valbuena está aquí, no es un sutil cumplimiento! es ese combate permanente con esa sombra y esa luz donde él comienza a pintar con su habilidad acostumbrada y duplica una sensibilidad clásica sin efectos inútiles.
Un trabajo que sin sacrificar nada a las modas actuales, logra sin esfuerzo bañar sus pinturas y sus Dibujos con una aureola de magia que a la vez nos confunde y nos encanta. La realidad del alma latinoamericana necesita su carboncillo depurado para expresarse. En efecto su técnica maestra le permite modular la ley esencial de los contrastes que hable del espíritu y saca del alma sus vibraciones.
No es un dibujante fotógrafo en busca de estética y de hiperrealismo, es un artista clásico que pone una mirada actual sobre esta América, pero nunca desprecia la belleza para pintar la realidad del hombre.
Los dibujos de Valbuena son bellos en sus constataciones silenciosas y sus fuerzas interrogativas. Pero cuando la luz sale del papel leído es para alumbrar a esos hombres sin rostro y probar que la obra es la de un artista portador de une esperanza. El trabajo del Maestro Valbuena, es una resignificación de los ídolos globales.
