El alcalde de Puebloviejo Francisco Gutiérrez Blanco lanzó un SOS por el peligro que representa para gran parte de esa población y especialmente del corregimiento de Tasajera, la erosión costera que cada día acaba con la poca extensión de tierra con que cuenta ese territorio entre el mar Caribe y la Ciénaga Grande de Santa Marta.
El mandatario, dijo “El tema de la erosión costera en nuestro municipio lo hemos dicho y estamos cansados de decirlo, amenaza con la existencia misma de nuestro municipio porque no tenemos sino la franja de tierra existente entre la Ciénaga Grande de Santa Marta y el mar Caribe. Nos hemos quejado porque no nos tienen en cuenta para algunas reuniones que se realizan y nos llegamos a enterar de este tipo de reuniones posterior a la celebración de la reunión”, sostuvo Gutiérrez Blanco.
En este sentido manifestó que le ha planteado la situación al Vicepresidente de la República, Angelino Garzón y ha hablado con el alcalde de Ciénaga Luís Tete Samper para aunar esfuerzos, pero lamentablemente las acciones que se han tomado desde la dirigencia nacional no han sido las mejores para frenar la arremetida del mar.
Gutiérrez Blanco, así mismo espera que la nueva bancada parlamentaria del Magdalena, se una, en torno a este tema que amenaza seriamente la existencia de muchas poblaciones.
“Queremos aprovechar a los nuevos parlamentarios magdalenenses y decirle que este es un problema que amerita la atención del Gobierno Nacional para que inicie las acciones contundentes, no que lleguen a mitigar, sino a solucionar definitivamente la amenaza”, agregó el joven mandatario puebloviejero.
El alcalde de Puebloviejo Francisco Gutiérrez, informó de igual manera que está estudiando jurídica y financieramente la posibilidad de declarar la calamidad pública para iniciar las acciones que mitiguen la erosión costera, concretamente en el corregimiento de Tasajera, emulando algo que hizo el municipio de Ciénaga, sin embargo es consciente que en su municipio no cuentan con los dineros suficientes para ejecutar las obras necesarias y por ello requirió la intervención de la Gobernación del Magdalena y la misma Nación, para que se comprometan y coadyuven a la solución de este fenómeno natural.