La Agencia Nacional de Tierras-ANT sigue cumpliéndole a las comunidades indígenas, realizó una maratónica jornada en 10 departamentos, entre ellos: Magdalena y Cesar.
La entrega se hizo en el Corregimiento de Puerto Mosquito, una zona localizada a 45 minutos del casco urbano de Santa Marta, a orillas del río Gaira, habitada por la etnia indígena Naara kajmanta, del pueblo Ette Ennaka – Chimila.
En esta oportunidad, la máxima autoridad de tierras de la Nación, entregó 1.225 hectáreas a la comunidad indígenas: Ette Ennaka –Chimila, asentadas en el municipio de San Ángel – Magdalena y Bosconia en el Cesar, y 92 hectáreas más al resguardo indígena Naara Kajmanta, del pueblo Ette Ennaka –Chimila, ubicadas en el corregimiento de Puerto Mosquito, zona rural del Distrito de Santa Marta.
En un primer acto, La Agencia Nacional de Tierras entregó el acuerdo de ampliación por segunda vez, al Resguardo Indígena Issa Oristunna, del pueblo Ette Ennaka, con cuatro predios del Fondo de Tierras para la Reforma Agraria Integral y dos de la misma comunidad, localizadas en los municipios de San Ángel, departamento del Magdalena y Bosconia en el Cesar, que beneficia a 1580 personas.
Mientras que, el Acuerdo de Constitución del Resguardo: Naara Kajmanta, del pueblo Ette Ennaka – Chimila, beneficia a 59 familias compuestas por 220 personas, se formalizan 92 hectáreas más 750 m2, que hacen parte de las más de 19 mil que benefician a alrededor de 4 mil familias de comunidades indígenas, en 10 departamentos.
El Cabildo Gobernador Ette Ennaka – Chimila, Andrés Martínez, agradeció la gestión realizada por la Agencia Nacional de Tierras, y dijo que se acabaron 22 años de espera: “Las comunidades indígenas, que durante tanto tiempo han sido marginadas y despojadas de sus derechos, hoy celebramos un futuro más prometedor. Con sus territorios recuperados, no solo podrán reconectar con sus raíces y tradiciones, sino también fortalecer su autonomía y desarrollo sostenible”, explico.
Las comunidades indígenas recuperan sus tierras ancestrales Patricia Caicedo Omar, Asesora para la Agencia Nacional de Tierras -ANT, que acompañó la entrega, fue clara en señalar que: “Este logro no solo representa la recuperación de tierras, sino también un reconocimiento a la historia y la cultura de estos pueblos. A través de vías legales y del diálogo, se ha logrado un acuerdo que promete mejorar significativamente la calidad de vida de miles de familias indígenas. La restitución de tierras es más que una simple devolución; es un acto de justicia y un paso hacia la reconciliación y el respeto por la diversidad cultural de nuestra nación”, puntualizó”.
Para el representante del Resguardo Indígena Issa Oristunna, del pueblo Ette Ennaka, Ricardo Gamarra. “Este es un testimonio del poder de la resiliencia y la perseverancia de nuestras comunidades indígenas, y un llamado a la sociedad para que continúen apoyando nuestros derechos y aspiraciones. La restitución de tierras es un comienzo, un símbolo de un nuevo camino hacia la justicia, la equidad y el reconocimiento pleno de los pueblos originarios” afirmó”.
