Por primera vez en seis décadas de construir el desarrollo del territorio, un grupo de académicos y directivos de la Universidad del Magdalena, encabezados por el Rector Pablo Vera Salazar Ph.D, participó de la Primera expedición científica intercultural – académica de intervención integral a las comunidades Arhuacas de la Sierra de Nevada de Santa Marta. Con la finalidad de fortalecer a la comunidad, impulsar el patrimonio cultural vivo de los pueblos indígenas del Magdalena y proteger el macizo montañoso, por medio de un trabajo conjunto de cooperación.
“Esta primera expedición intercultural y académica de intervención integral de la Universidad en la Sierra Nevada con la comunidad Arhuaca del Magdalena surge de un trabajo conjunto de cooperación en el marco de un convenio amplio que busca apoyar a la comunidad Arhuaca (…) luego de una articulación muy fuerte en mesas de trabajo con el líder de la comunidad de Kankawarwa, Rogelio Mejía Izquierdo, el equipo de trabajo del gobernador Arhuaco Danilo Villafaña Torres y su equipo de trabajo” señaló el Rector Vera Salazar.
A través de un trabajo articulado entre la academia, las autoridades tradicionales, el equipo representativo de la comunidad indígena y los docentes locales, la Alma Mater apoyará a la comunidad ancestral, en ocho grandes áreas de trabajo que abarcarán aspectos como: turismo, salud, etnoeducación, infraestructura, emprendimiento, seguridad alimentaria, rescate tradicional ancestral y la conservación, preservación y adecuada gestión ambiental de los ecosistemas de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Para el Gobernador del Cabildo Arhuaco del Magdalena y La Guajira, Danilo Villafaña Torres, uno de los gestores de este encuentro, son varios temas qué, aunque parecen sencillos de trabajar, son de gran trascendencia para resolver las necesidades colectivas e individuales de los miembros de la comunidad indígena. “Pensamos en colectivo, por todo, pero el que padece las cosas son las personas y nos olvidamos de las personas (…) yo quiero que se mantenga ese entusiasmo que ustedes ya tienen y que nos podamos consolidar y en cuatro años vemos los resultados. Y mientras más respuestas le demos a las necesidades de nuestra gente, más bienestar, más cultura también”.
Durante tres días, la expedición estuvo en Windiwa, comunidad Arhuaca ubicada en la cuenca alta del Río Fundación, donde se reunieron con las autoridades políticas y tradicionales y la comunidad en general, para hacer una serie de acuerdos sobre los cuales trabajar. En esta relación de mutua cooperación se definieron los siguientes temas:
Revisar críticamente el modelo de etnoeducación para determinar si realmente responde a las necesidades, intereses y expectativas actuales. Ofertar las licenciaturas en Literatura y Lengua Castellana, Matemáticas, Ciencias Naturales y Educación Ambiental. Dotar de pupitres, tableros, archivadores las aulas en comunidad de Windiwa.
Establecer convenios para que médicos realicen su rural en el puesto de salud y consideren la posibilidad de quedarse en la Sierra. Brindar conectividad, para que los estudiantes, profesores y encargados del área de salud tengan otras alternativas de atención. Apoyar el laboratorio clínico y generar una articulación para implementar la telemedicina, formación de profesionales en el área de medicina, odontólogos, auxiliares de enfermería. Y fortalecimiento de la medicina tradicional.
Instalar fluido eléctrico en aula remodelada por medio de paneles solares y dotación de computadores, mobiliarios al servicio de los estudiantes universitarios que desarrollan las clases virtualmente (docentes en ejercicio de la comunidad y aledañas) y jóvenes bachilleres de la comunidad. Apoyar al desarrollo de la comunidad con la parte tecnológica: hidroeléctrica, motores (trilladoras de maíz y arroz).
Apoyar la seguridad alimentaria, mediante la asesoría a la producción y la capacitación en aspectos nutricionales que fortalezcan el consumo adecuado de la proteína, en piscicultura, apoyo para cría de peces (capacitación, práctica y cultivo), sala para laboratorios; cría de cerdo, entre otros, para garantizar el sustento a las familias.
Desarrollar una estrategia de comercialización y marketing para la producción artesanal de mochilas, en la que se destaque la denominación de origen y los servicios ecosistémicos que el pueblo Arhuaco presta a la Sierra Nevada de Santa Marta. Así mismo, para productos como el café, el maíz y la panela. Por ejemplo, montar una cooperativa multi activa que maneje los trapiches, pero también que maneje una marca registrada y su denominación de origen, de panela arhuaca 100 % orgánica para que en Santa Marta y Fundación no se compre una panela diferente a esa.
También definieron aspectos como, formular una política pública de turismo que se base en principios de conservación ecológica y cultural. Definir una estrategia de formación de liderazgos bajo los principios de la ley de origen y los saberes ancestrales propios mediante la formulación del proyecto “el ancestro que seremos”. Brindar capacitación en estudios de suelos y emprender una campaña de arborización.
Fortalecer el sistema de gobierno Arhuaco con base en el registro de las formas de liderazgo tradicionales y la definición de una estrategia que permita la transmisión de conocimiento intergeneracional. Transferir el empoderamiento de género para impulsar el trabajo de tejido técnico-producción y comercialización.
Señaló el cabildo gobernador Villafaña Torres que todas estas capacidades académicas se deben trabajar con identidad, donde se adopte y se adapten las acciones a las necesidades de la comunidad para así resistir otros 500 años. Que, así como se preocupan por llevar a su gente a las universidades, es necesario preocuparse porque haya aprendices de los mamos en las Kankurúas. Con lo cual se hace fundamental que la estrategia esté orientada al liderazgo.
Para el doctor Jorge Iván Sánchez Fontalvo, director de la Licenciatura en Etnoeducación y director del Doctorado en Educación, Interculturalidad y Territorio, la Universidad con toda su connotación académica no representa un dominio del conocimiento. El conocimiento se está tejiendo en las comunidades, pero lastimosamente no se ha reivindicado, no se ha exaltado y mucho menos no se ha utilizado en la práctica para hacer de la universidad más rica con sus contextos, con sus comunidades. Por eso esta expedición es un momento trascendental y el Rector Pablo Vera ha marcado un hito en la historia de la Universidad, porque nunca se había hecho de esta magnitud.
“Pienso que el principio fundamental es saber escuchar, independientemente de las buenas intenciones y de las propuestas que se puedan planificar. Se ha evidenciado claramente a partir de la intervención del cabildo gobernador que cada palabra representa un mundo simbólico. Y podemos equivocarnos en la interpretación. Eso nos plantea a nosotros un debate en este momento. Vamos a ser muy cuidadosos en que el acompañamiento que podamos hacer sea un acompañamiento horizontal”.
En la expedición estuvieron presentes por parte de la Universidad, el Doctor Pablo Vera; el doctor Jorge Elías Caro, vicerrector de Investigación; el doctor Jhon Taborda Giraldo, vicerrector de Extensión; el doctor Iván Sánchez Fontalvo, director de la Licenciatura en Etnoeducación y director del Doctodado en Educación, Interculturalidad y Territorio; el doctor Juan Carlos Vargas Ruiz, director de Antropología; el economista especialista Edwin Guerrero Utria profesor de Ciencias Empresariales y Económicas; y el magister Mauricio Arrieta director del Cetep.