Teníamos la certeza de que a medida que avanzaba el tiempo se abría el panorama para que nuestra juventud se profesionalizara y de esta manera surgieran en cada región hombres y mujeres capaces, con el virus de la política, incursionar en ella y darle nuevos aires a la parafernalia de las lides políticas en pos de ocupar cargos para reemplazar a los ya anquilosados dirigentes de otrora.
Y, en esta nueva época de elecciones hemos visto como nuevos y juveniles personajes se han atrevido a promocionarse con el fin de que el elector primario conozca otras propuestas que pueden ser de aceptación y llevar a ocupar los cargos de elección popular a personas que piensen y sientan que el progreso de una región o población está en sus manos.
Cuando creíamos que esas mañosas prácticas se habían acabado, hoy en estas elecciones, pareciera que con sus malas prácticas el candidato dispusiera de los otros candidatos o de los seguidores de tal o cual candidato, o los intimidara para que se abstuvieran de pisar a fondo el acelerador, pues con la juventud e ideas nuevas seguro triunfaría en las urnas, entonces quien no quiere perder el poder apela a lo sucio, a lo infame para quitar del camino el obstáculo que se ha presentado.
Otras prácticas, que pensábamos se habían acabado, han vuelto a aparecer, hablamos de la aparición de pasquines, la utilización de los micrófonos para denigrar de los otros candidatos o de sus familiares, actitud absurda por demás, pues, no somos quien para juzgar lo que hayan hecho y que solo les corresponde al que realizó los actos ilícitos responder por ellos ante la justicia, que es la única entidad que puede y debe juzgar y castigar por los actos cometidos.
Aprovechemos que estamos en la recta final, para que este 25 de octubre los aspirantes se conviertan en Gobernador (a), alcaldes, concejales y diputados, pero, que el alcanzar el triunfo, se deba a que las propuestas presentadas fueron analizadas por el elector que decidió entregar la confianza, pues, considero que esa era la persona capaz de traer las soluciones para que su territorio, municipio, corregimiento o vereda alcancen un verdadero desarrollo, que las propuestas en cuanto a salud, educación, infraestructura vial, servicios públicos, llenaban sus expectativas lo inclinaron a depositar el voto por estas propuestas hechas por la persona que sin ser ‘amiga’ encarna los deseos de progreso de la comunidad.
En Colombia estamos viviendo un proceso que busca la paz y los colombianos desde hace más de 50 años venimos padeciendo los estragos de una guerra incongruente, inadmisible, que a la larga no tiene explicación, pero que ha llenado de luto a innumerables familias colombianas, ayudemos todos a conseguir la paz, despojémonos de violencia y desde las elecciones, demos el ejemplo.