Andenes en adoquín con diseños alusivos a objetos de la cosmogonía, la cosmovisión y la cotidianeidad arhuaca como el Garwa, que significa “El Padre de los Caminos”, que en la cultura ancestral identifica a las familias, es el patrón de las camineras que se aprecian en la obra de la calle 30 entre carreras cuarta y quinta en el Distrito de Santa Marta; diseños que sólo estaban siendo apreciados en las mochilas que elaboran los indígenas de esta etnia, pero que hoy, el Gobierno del Cambio ha incluido en las obras que ejecuta la Alcaldía Distrital a través del Sistema Estratégico de Transporte Público – SETP- como parte de la Propuesta Urbana Arquitectónica, con el propósito no sólo de brindar un encanto a la vista, sino de resaltar los elementos propios de la cultura e identidad de los samarios y generar sentido de pertenencia de dicho sistema a cada uno de los usuarios.
Hoy, transitar por este punto de la ciudad va más allá de la utilización de una vía nueva, bonita, agradable e incluyente para todos, es caminar o pasar por un espacio que conecta a los ciudadanos actuales y a las nuevas generaciones con parte de la cosmología e historia de nuestros antepasados, sumergiéndonos en cada paso en un obra de arte donde los colores tierra, gama de marrones, beige, escala de grises y negro que la complementan nos conecta con el paisaje natural que nos rodea y con la tierra que nos representa.
